Un país iberoamericano, México, albergó la primera conferencia internacional de Financiación para el Desarrollo de Naciones Unidas. Han pasado 23 años desde que los líderes mundiales se reunieran en Monterrey para discutir los desafíos de financiar una agenda global. Después volvieron a hacerlo en Doha, en 2008, y en Adis Abeba, en 2015.
La cita en otro país iberoamericano, España, en Sevilla en 2025, tiene lugar en un contexto completamente diferente. No es solo que las necesidades de financiación para las transiciones hayan crecido exponencialmente. Es, sobre todo, que los principios sobre los que se basaban la cooperación y la ayuda al desarrollo están siendo profundamente cuestionados, tanto como el orden liberal internacional sobre el que se sustentaban.
La 4ª Conferencia para la Financiación para el Desarrollo es una nueva ocasión para tratar de introducir cambios en un sistema global que no está sirviendo para el propósito para el que fue creado y, de paso, para confrontar ideas sobre cómo abordar desafíos globales y necesidades locales de una manera viable y sostenible.
Iberoamérica tiene mucho que aportar a esas discusiones. Por ello, este número de Pensamiento Iberoamericano aglutina en esta ocasión una muestra de los debates en torno a la financiación al desarrollo, buscando siempre compartir una perspectiva propia.
El futuro de la cooperación y la ayuda al desarrollo, el papel de la cooperación Sur-Sur y Triangular, diversas propuestas sobre cómo medir dicho desarrollo, las necesidades específicas de la transición verde, de la lucha por la igualdad, la perspectiva de las ciudades, la de los bancos de desarrollo, la gestión de la deuda o la tan postergada reforma de la arquitectura financiera internacional son algunos de los temas que encontrarán entre nuestros contenidos. Entre las firmas encontrarán representantes de gobiernos, de instituciones, de la academia y de la sociedad civil.
Un esfuerzo por ofrecer un abanico de ideas y de contribuir a estos trascendentales debates desde el ámbito iberoamericano. Porque en esta materia, como en tantas otras, Iberoamérica tiene mucho que decir.
Esperamos que aquí encuentren contenidos estimulantes.